Debemos estar capacitados para reconocer y responder al abuso antes de que ocurra en la iglesia. Las políticas, los procedimientos, las pautas y las prácticas para salvaguardar a los inocentes son solo el comienzo.
Aquellos que buscan abusar de niños, adolescentes o adultos vulnerables ven a la iglesia como un blanco fácil si la capacitación, la evaluación, la aplicación de políticas y el compromiso con la seguridad no son evidentes. Seguridad y Protección NC reúne una plétora de herramientas útiles, capacitación y recursos para que las iglesias crezcan en su preparación y respuesta al abuso.